miércoles, 7 de mayo de 2014

Mini pastel


Una buena manera de presentar un pastel es hacerlo de forma individual, de ésta manera no tenemos que estar cortando un pastel o bizcocho y servirlo cuando tenemos invitados.

En éste caso haremos una plancha de bizcocho red velvet, y cuando esté completamente frío cortamos unos medallones de unos 8 cm de diámetro con ayuda de un cortador bien afilado, de otra forma romperíamos los bordes.

Para el relleno usaremos un frosting de queso teñido con colorante rojo. Para el frosting necesitaremos 

200 ml de nata
75 g de queso tipo philadelphia
75 g de azúcar glas

Empezamos a batir la nata, cuando adquiera una consistencia cremosa, añadimos el azúcar glas de a poco. Antes de que la nata esté completamente montada, agregamos el queso y el colorante y seguimos batiendo hasta que la nata esté firme. Ponemos en una manga con boquilla lisa para rellenar las capas.



Preparamos un almíbar flojo, para mojar las capas y que no nos quede seco el pastel. Cubrimos un medallón con el frosting, y luego ponemos otro medallón por encima de la crema y seguimos intercalando hasta obtener un pastel con los pisos que queramos.

Para rematar ponemos frosting sobre la última capa y decoramos con fresas bañadas en chocolate blanco.


Os puedo asegurar que es fácil y rápido de preparar, riquísimo y fresco...sencillamente imperdible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario